Una vida marcada por un padre idealizado
El padre
A mi padre[1] lo recuerdo siempre delicado del estómago y siempre consumiendo unas botellitas pequeñas. [2] Se lo aconsejaron en una consulta médica que realizó en Bilbao. El médico que aquí lo atendía era don Angel Guevara [3] y él fue quien le aconsejó hacer esa consulta.
El doctor de Bilbao, cuyo nombre no recuerdo, al revisarlo le preguntó quién le acompañaba. Parece que esto le hizo
pensar que algo malo se le venía encima, y le pidió que le dijera directamente
lo que había; que si era mal de muerte, ya desde pequeño sabía que un día moriría. El doctor le contestó que el
mal le ocasionaría la muerte si Dios no lo remediaba.
Según la madre, cuando a la vuelta Bilbao se reunieron en Vitoria, le dijo que al día siguiente retornarían para hacer varias cosas que tenía pendientes con amigos, etc. Nada más volver a casa, todo lo quería
hacer en poco tiempo pues tenía prisa en dejar ordenado todo y a todos. Seguidamente hizo
un plan y se lo presentó a la madre. En él quiso fijar a cada uno de los hijos
en el lugar que creía más adecuado para cada uno, para poder él morir
tranquilo.
Murió en el año 1933 el 20 de mayo a los 43 años de edad. [5] La consulta la hicieron el 2 de febrero.[6] Para mí había dispuesto que me trajeran a Vitoria para que aprendiera ebanistería, en un taller de la calle la Francia que era propiedad de un amigo suyo.[7]
El caso es que en teoría nos había abierto camino a todos los que estábamos en casa con la madre, pero el resultado fue todo lo contrario. A mi padre no se le ocurrió que podría haber una guerra el año 1936 y la hubo. Esto derrumbó todos los planes que con tanto empeño había preparado.
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(1988) L@s herman@s - Cortesía de Alfredo R-d-I
PENSAMIENTOS SOBRE MI PADRE
Poco más podría decir si no me ciñese a los hechos. Mis hermanos mayores, y en especial Jesusa, [8] comentaban que siempre me toleraba todo, consintiéndome lo que normalmente a los demás no permitía. Habría que preguntarse por qué.
Estando él ya en cama, todas las tardes después de la escuela le acompañaba “Luisito”.[9] Quería saber lo que hacía en la escuela y aconsejarme. Le gustaba mucho que leyera en un libro que tenía entre otros con el título “Lecturas para una buena muerte”,[10] seguidamente me comentaba si comprendía bien lo que había leído.[11]
Recuerdo muy bien que llegaba a casa una revista extremeña de la Virgen de Guadalupe y si había alguien forastero, para que oyese el sujeto cómo leía en extremeño, me decía: ¡Luisito lee un poco! .[12] Lo haría bien porque me tenía bien entrenado.
Me inculcaba mucho el respeto a todos, pero de manera especial a la madre.[13] Me advertía mucho del cuidado que había que tener en el trato con los otros. Hechos que resaltaban más su carácter.
A MI PADRE ANGEL
Día dos de agosto de dos mil siete. Fiesta de Ntra. Sra. de los Ángeles[14] y fiesta onomástica de mi padre.[15] Recuerdo que en la celebración se sacrificaba el gallo caporal,[16] aunque es cierto que se le preparaba para este día desde el año anterior. No recuerdo que se hicieran cosas extras ese día, ni globos ni cohetes, sólo gallo y garbanzos.[17] Pero lo bueno es que no me he olvidado de su cumpleaños.
Recuerdo muy poco cómo era físicamente el padre. Había un maestro en Matauko que frecuentemente lo veía en Estibaliz y entonces era como ver a mi padre.[18] No sé si se asemejaba, pero yo creo que algún parecido tendría. Este maestro era muy similar a mi padre pues tenía el pelo débil, se peinaba a raya y era de poca barba.
Me han llegado hechos personales que los ofrezco a su memoria. Según mis hermanos mayores yo era su preferido. Es comprensible que fuera así por ser el hijo pequeño, aun siendo la benjamina Mª Estibaliz.[19] Dicen que yo era muy trasto y cualquier trastada que hiciera, mi padre lo tomaba como una gracia.
Como he dicho no recuerdo la
estatura de mi padre, pero sí recuerdo el cariño que me ofrecía y lo buen
consejero que era. Y ahora que me concentro para presenciarlo y recordarlo más
cercano, a pesar de que su ausencia es de varios lustros, creo que lo estoy
consiguiendo; y siento que me invaden los sueños sin querer pensar que no sean
una realidad.
Mi vida con él no pasó de ser
la de un niño de nueve años al que con frecuencia repetía, “cuando seas mayor”….
Cosa imposible el saber cómo pensaría ahora que soy mayor, y cual sería su veredicto:
¿aprobado o rechazado?
“Observo que yo me he parecido a él, por haber sido el único hijo que ha peinado el pelo a raya, mi poco pelo, casualidades de la vida. Me alegro en parecerme a él, de manera especial en lo positivo. Como tengo fe de que el amor nunca muere, siendo así te brindo mi amor”.
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Carta de despedida
Moisés era el segundo hijo varón que por entonces, con catorce años, se encontraba estudiando en el internado de los Hermanos Maristas de Antzuola. [20] Su padre Angel, veintiún días antes de fallecer, le escribió la carta que aquí reproduzco fielmente.
Venditos sean los dulces nombres de Jesus Jose y Maria
Querido hijo: Estoy todabía con todo conocimiento de mis aciones, y por lo mismo aprobecho estas escasas fuerzas que tengo, persuadido que si Dios me las conserba es para emplearlas en dar a conocer su dibina providencia.
El miercoles recibi los Santos Sacramentos de Viatico y extremunción los pedi con urjencias, pase miédo, si no podria recibir al señor por que los bomitos me acobardaron, y después la he recibido dos veces mas, y mañana estoy con grande esperanza que lo bolbere a recibir.
Estoy confundido, no me conozco, de todo corazon te digo que todo lo que biene de la mano de Dios no hace sufrir si lo sabemos recibir, he gozado yo mas en estos diez dias que llebo en cama que en toda mi bida pasada.
Mi ultimo consejo como el de nuestra despedida si buscas á Dios nuestro señor en tus trabajos y sufrimientos lo hallaras y nada te hara temer, si no gozas de esta compañia nada podras y el miedo te confundera. Tu padre
Angel Aguirre
Muchas gracias a tos los hermanos por sus oraciones y Dios les pagara con creces.
Oreitia 9-3-1933
[1] El primogénito Angel de Aguirre Ortiz de Zarate (Oreitia 1886-1933), hijo de los renteros de la “Casa-Molino del Marqués”, casó en la iglesia de San Vicente (Gasteiz 20-5-1911) con Antonia Quintana Garcia de Vicuña (Argandoña 1887-1974 Gasteiz).
[2] El elixir estomacal “Saiz de Carlos” fue un preparado farmacéutico (Citrato de bismuto
soluble, extracto de quina y alcalinos) ampliamente comercializado. En
Marzo de 1933 cada botellita costaba en farmacias 5,85 pts. Se anunciaba como
un producto milagroso que prometía curar varios tipos de enfermedades
relacionadas al aparato digestivo. Su creador, Ramón Saiz de Carlos (1857-1926),
fue farmacéutico y diputado liberal en el Congreso por el distrito de Vinaròs
(Castellò).
Ahora: diario gráfico del 4 de marzo de 1933, nº 693
[3] Angel de
Guevara Ajuria Alvarez de Arcaya Iñurritegui era nacido en Gasteiz (1887) pero sus padres eran de Junguitu. Desde 1913
licenciado en Medicina y Cirugía por Valladolid, fue Médico titular del
Ayuntamiento de Vitoria. Solicitaba el 27-06-1925 "autorización para talar un
árbol sito junto a la carretera porque perjudica la entrada a su chalet de
Ilarratza". En Septiembre de 1936 ofreció dicho chalet para ser utilizado por
los golpistas como Hospital de Sangre con 10 camas.
Heraldo Alavés nº 4865 - 1913 Agosto 07
[4] En 1915 los antiácidos son recomendados por primera vez
para el tratamiento de la úlcera péptica. Debido al fracaso del tratamiento
médico, hasta la década de los 60 del siglo XX se recurría al tratamiento
quirúrgico. Los cirujanos operaban a casi todos los pacientes ulcerosos. Según el testimonio de Luis,
su padre Angel era escéptico con los avances y se negó a operar, mientras otro del
pueblo lo hizo y salió adelante.
Heraldo Alavés nº 10211 - 1932 Enero 15
[5] La fecha
exacta es el 30 de Mayo de 1933 a los 45 años a consecuencia de un cáncer de
estómago. El testamento lo formaliza en Vitoria el 9 de Febrero de 1933 ante el
notario Don Angel de Ayala y Gonzalez de Junguitu.
[6] Es muy posible que hicieran la consulta en el Hospital del Doctor Vicente San Sebastián Arenal (Bilbao 1887), reputado cirujano de la época. La historia le recordará como el primer cirujano que realizó una operación de perforación gástrica en España. Grandes toreros de esa época salvaron la vida por intervenciones suyas en la plaza de Vista Alegre. Supongo que estuviera vinculado al Dr. Angel Guebara Ajuria dado que son coetáneos y ambos cursaron la misma carrera.
[7] "Carpintería Mecánica y almacén de maderas de Francisco Medinaveitia" Abrevadero, 2 - Tel. 1651 Vitoria 9). "El abrevadero" estaba situado en la pequeña plazuela que se forma entre cada una de las casas “que dan a la calle del Torno por un lado y a la de Francia por otro”. En la primera edificación, en el nº 2 a la derecha, estuvo el taller de carpintería de Francisco Madinaveitia Ybañez de Opacua “Barrenicos” (Ullibarri-Jauregi 1870 - 1940 Gasteiz) notorio industrial, concejal y antitaurino (La Libertad nº 9853 - 1921 enero 26). “Bizkaitarra” represaliado, fue encontrado muerto en un sótano “por un accidente casual”. (Pensamiento Alavés 1940 /09/11).
[8] Su madre Antonia, casada con Angel (1911-05-20),
trajo al mundo 8 hij@s: Carmen (1913), Félix (1915), Hija muerta por
asfixia siendo bebé (1916) Jesusa “Sor Salomé” (1917),
Moises (1919), Mª del Amparo (1921), Luis (1923) y
Mª Estibaliz (1926).
[9] Desde la cama también estuvo dirigiendo y controlándolo todo en el molino. Como anécdota, cuentan que
habiendo mandado a su hijo Félix con 17 años a comprar un cerdo en el mercado
de Gasteiz, a su vuelta le hizo subirlo a su cuarto para juzgar si la compra
era de su gusto. Mientras vivieron, los hijos e hijas nunca tutearon ni al
padre ni a la madre. Las muestras de cariño solo eran para los txikis y “cuidando
mucho de no entecarlos”. El primer beso de su madre que Luis recordaba fue
cuando al marchar al servicio militar se despidió de él. La mayor caricia que
como tal sentía de chaval, era cuando en ocasiones señaladas le peinaba con
primor. Siempre manifestaba que nunca tuvo infancia.
[10] Atribuidas a San Luis María Grignion de Montfort y publicadas tras su muerte en 1716, las "DISPOSICIONES PARA LA BUENA MUERTE" guiaron al padre agónico, postrado en cama y en la fase final de su enfermedad. “Sufrir pacientemente la enfermedad, porque Dios la envía, porque puede librarnos del destierro, porque nos hace expiar los propios pecados y creer firmemente que ella nos llevará a la muerte”. (1ª de las "Disposiciones próximas")
LUIS MARÍA GRIGNION (1673 - 1716).
[11] No es un texto de fácil para un teólogo, y mucho menos para un crío de
nueve años. Sin duda las lecturas marcaron en Luis la aceptación de la muerte y siempre la desdramatizaba con mucho sentido del humor.
[12] Aquí la distribuían los franciscanos de Arantzazu y en ocasiones aparecían breves textos en "fabla" extremeña.
Editada
por la Comunidad Franciscana desde 1916 hasta 1963 con el título de
"El
Monasterio de Guadalupe", cambió su cabecera por otra más
breve: "Guadalupe", con la
que continúa imprimiéndose con un carácter muy conservador hispánico y colonialista. En 1908 los franciscanos llegaron con la
tarea de levantar este lugar cacereño tras la “Orden Jerónima” y tiempos
oscuros de decadencia.
Año VII Número 167 - 1913 Diciembre 15 / "Guadalupe" revista quincenal
[13] Por un “respeto extremo” no se
casó con una labradora de Artomaña (Amurrio) en cuya casa ayudaba en la faenas agrícolas cuando libraba del servicio militar en Bilbo. Luis por entonces siempre soñaba con ser labrador, pero su
madre no podía soportar que fuera a esposar tan lejos. Fiel al proverbio “el
que fuera va a casar, o va engañado, o va a engañar” siempre le disgustaron a la abuela esos matrimonios dentro de la familia.
[14] Es uno de los títulos con los que
los católicos honran a María. Este título se generalizó gracias a la acción de
los frailes franciscanos: la pequeña iglesia cerca de Asís se dedicó a Santa
María de los Ángeles, que San Francisco de Asís eligió como su hogar "debido
a su veneración por los ángeles y su amor especial por la madre de Cristo".
[15] Al nacer no es muy corriente en la
familia poner por nombre el santo del día, pero el abuelo Angel (1886-08-02) es
la excepción. Por tanto, lo celebraban aunque otros cumpleaños pasaban
desapercibidos.
[16] “Caporal” en germánico
significa “gallo”, pero procede del italiano “caporale”. Lo más
probable es que se refiera a “un capón”. El capón es un gallo castrado a
la edad de cuatro meses aproximadamente, antes de comenzar el proceso de
engorde. Recuerdo ver a mi padre castrando alguno en casa del tío Moisés.
También lo hacía con los conejos.
[17] Los garbanzos también eran
excepcionales en el menú molinero. Solo en algunas fiestas y siempre en navidad
junto con la berza.
[18] Gregorio Velez de Mendizabal Charroalde (Ullíbarri-Gamboa 1893-12-24) hijo de Feliz Velez de Mendizabal Martinez de Zabaleta y de Juana Charroalde Olarte. Tomó la plaza de Matauco en 1922 (Convocatoria 10 de julio de 1922) y seguía en ella en 1943. En 1937 fue juzgado “con un expediente de depuración” y “suspendido de empleo y sueldo por seis meses”. (Pensamiento alavés nº 1524 - 1937 Diciembre 30).
[19] María Estibaliz había nacido el 16 de Febrero de 1926 y falleció con 15 años en el Hospital civil de Vitoria el 8 de Marzo de 1941 a consecuencia de una "gangrena faríngea".
[20] Moisés (Oreitia 1919) ingresó a los 12 años (curso 1931-32) en el "Instituto de los Hermanos Maristas de la Enseñanza". Instituto religioso fundado por el beato francés Marcelino Champagnat (1789-1840) dedicado a la enseñanza "de niños y jóvenes pobres y privados de educación cristiana en zonas rurales apartadas". En 1908 recalan en Oñati y en Antzuola instalan ese mismo año el seminario y noviciado donde hasta 1968 se formaron más de mil maristas. Con los años se extendieron por todo Euskal Herria. Si hablabas en euskera te castigaban. En Araba tienen un gran casa-seminario en Artziniega hoy en día abandonado.
15 Mayo de 1905 Heraldo Alavés
Año 1934 Publicidad en la prensa madrileña
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